Sin importar si ya estás de regreso en el campo de golf o sigues en casa, es importante que sepas que el estado de limpieza y cuidado de tus palos afecta directamente tu juego, ya que la limpieza ayuda es un factor fundamental en el control de la bola.
Además, al tener limpias las estrías de los palos tu impacto será más limpio por lo que produce mejores efectos a la bola.
A continuación te compartimos algunas recomendaciones para cuidar tus palos y mantenerlos limpios:
Comprar un kit especial
Un gran paso para mantener en óptima condición tus palos es comprar un kit de limpieza creado especialmente para la limpieza profunda de los palos. Este tipo de conjuntos si bien no son baratos son una gran inversión, ya que incluyen elementos como cepillos especiales, ceras abrillantadoras, antideslizantes para los grips, bayetas y esponjas que entregan resultados profesionales.
Si no quieres invertir tanto en estos kits, hay otros más sencillos que además puedes llevar contigo a cualquier lugar por si tienes alguna “emergencia” en medio de un encuentro. Estos suelen ofrecer escobillas y cepillos básicos para limpiar superficialmente. Te recomendamos que este tipo de utensilios lo dejes para ocasiones esporádicas, ya que si no se utilizan correctamente puedes rayar los palos de golf.
Cualquiera de estas opciones las encuentras fácilmente en las tiendas especializadas en artículos para golfistas.
Usar máquinas de ultrasonido para palos de golf
Si eres de los que regularmente visita los campos de golf, sabrás que en la mayoría de ellos puedes encontrar máquinas de ultrasonidos que limpian a detalle los palos. Su sistema se basa en el uso de estos movimientos para eliminar toda la suciedad de la superficie de los mismos.
Este servicio de paga adicional, suele ser bastante rápido y te asegura resultados bastante aceptables.
Limpieza básica en casa
La opción más económica y que no requerirá de gran equipo es limpiarlos en casa con elementos que ya tienes como una cubeta, un cepillo de dientes, una toalla y jabón líquido.
En una cubeta con jabón líquido y agua, remoja la cabeza de los palos por unos minutos, asegurándote de no llegar a la varilla de estos, ya que eso podría dañarlos. Esto eliminará gran parte de la suciedad que está atrapada en las estrías.
A continuación frota cada palo de uno en uno, con un cepillo de dientes o un cepillo pequeño cuyas cerdas no sean metálicas, para quitar restos de hierba o lodo que se hubiera quedado ahí.
Enjuaga con agua limpia a la perfección, hasta que veas que ya no queda nada de jabón o suciedad, para finalizar secando con una toalla suave limpia.
Palos guardados por mucho tiempo
Si tienes meses o años sin jugar golf, es probable que tus palos estén en un rincón acumulando polvo, por lo que lo ideal es limpiarlos de vez en cuando. La mejor forma de eliminar cualquier partícula extraña o de polvo es frotándolos con un paño mojado con un poco de agua tibia y jabón neutro.
En caso de que tu equipo vaya a estar guardado por muchos meses, lo ideal es que evites temperaturas extremas, ya que podrían dañarse los grips con temperaturas muy altas o muy bajas.
